Tal vez bastaba el aire, viento fresco que mecía nuestros cabellos mientras las acompasadas olas del agua cristalina reflejaban cada rayo de luna que dilataba nuestras pupilas. Mis pensamientos ausentes sin otro objetivo que perderme en la belleza de tu rostro, no había tiempo ni existía mas espacio que aquel separando por centímetros nuestros cuerpos, las yemas de mis dedos acariciando tu tersa piel y el sonido de la noche erizando nuestros deseos.
Solo se necesitaba el aire para poder decirte un millón de palabras que estremecieran tu alma, porque sabemos que tu y yo tenemos un vínculo inquebrantable y nos pertenecemos incluso mucho antes de haber nacido, nuestro amor es mas antiguo que el sol y que el mismo tiempo, juntos hemos sido cada una de las constelaciones y hemos cruzado el infinito numerosas ocasiones, ahora tan sólo nos estamos regalando la mágica aventura de habitar ésta tierra, éste espacio lleno de sinuosos caminos para muchos, pero no para nosotros que estamos más allá del bien y el mal, que somos ambas cosas juntos y que somos nada separados.
Cuando decidimos ser el uno del otro nos volvimos invencibles, no permitimos que nadie quebrante nuestro idilio y no sabemos de heridas a pesar de encontrar mil obstáculos. En cada beso se detiene el mundo, sólo el latir de nuestros corazones irrumpe en el silencio y el resplandor del alma ilumina todo espacio. Puedo escuchar si me llamas a kilómetros de distancia, un escalofrío me recorre el cuerpo si estás en peligro y salgo corriendo en tu auxilio, tu amor es capaz de percibir mi miedo y lo cura, mi único miedo es no estar contigo.
Tal vez, tal vez solo basta el aire para seguir viviendo, pero solo te necesito a ti para seguir soñando.
Luis Alberto
(abril 15, 2009)
lunes, 18 de mayo de 2009
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